La inflación de los alimentos en marzo subió hasta el 16,5%. Una situación que podría agravarse con la sequía que afecta al 60% del territorio español. El Gobierno es consciente de la situación y está en alerta ya que “la oferta en algunos productos puede ser baja y eso llevaría a una tendencia alcista en precios”, ha asegurado Fernando Miranda, secretario general de Agricultura y Alimentación.
Situación que solo sería salvada por el hecho de que España importa mucho cereal. “Si en el hemisferio norte y sur hay cosechas normales, los cereales tendrán precios normales”, ha afirmado durante la presentación del ‘Informe Económico’ 2022 de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB). Si no ocurre eso, subirán los precios tal y como vaticinan desde el campo español.
“Es un momento de mucha incertidumbre en el que tendremos que evaluar el impacto de la sequía”, ha añadido. De hecho, no todos los cultivos se ven afectados por igual. “No sabemos qué pasará con la producción de los olivares y cómo se puede desarrollar la campaña de cítricos de hueso”, ha destacado.
De ahí que en el Gobierno estén en alerta. “Estamos vigilantes y en contacto con la industria, la alimentación y los agricultores para que todas las cadenas se comporten”, ha comentado. De hecho, este 19 de abril el Ministerio de Agricultura ha convocado la mesa de la sequía.
En un escenario más positivo, Miranda cree que la tendencia nos lleva a una moderación de precios. “Si la situación de la sequía no arroja situaciones extremas esa moderación se trasladará a los precios. Esa debería ser la tendencia siempre y cuando los escenarios de incertidumbre lo permitan”, ha indicado.
De igual manera,Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB, ha avanzado que “podemos intuir que si la sequía no afecta la inflación ni hay otros elementos que afecten, los precios irán bajando en un precio razonable”.
No obstante, ni desde la industria ni desde el Ejecutivo ponen fecha a esa relajación de los precios por la incertidumbre del momento.
Impacto de la inflación
Así, parece que la inflación continúa siendo tan protagonista como lo fue el pasado año. Y eso tuvo reflejo en la industria española de alimentación y bebidas que frenó su crecimiento en 2022, por lo que cerró el año con una producción de 144.955 millones de euros, un 1,5% más con respecto a 2021, según los datos del Informe Económico de FIAB.
En concreto, el aumento de los costes productivos debido al agudo aumento del valor energético, de los transportes y de las materias primas, entre otros factores, han limitado la trayectoria positiva del sector.
El volumen del consumo se ha retraído hasta los 66.294 millones de euros, lo que supone un 1,1% menos, mientras que el gasto medio por persona en el hogar cae el 1,8%, hasta los 1.427 euros con relación al mismo periodo de 2021.