Enagás, el operador de la red de transporte de gas natural en España, tiene previsto invertir 575 millones de euros para acometer el tramo del H2Med, el tubo para transportar hidrógeno que conectará a través de Barcelona y Marsella la producción de este gas generada en España con el resto del continente.
Según explicó el consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo, la empresa prevé construir una red troncal de 450 kilómetros de hidroductos en la Comunidad Valenciana con ese desembolso para enlazar valle del hidrógeno de Cartagena por el sur con el hidroducto Barcelona-Marsella por el norte, además de atender con hidrógeno verde los grandes centros industriales de la región.
Precisamente la refinería de BP en Castellón anunció una inversión de 2.000 millones de euros hasta 2027 para reconvertir parte de su actividad al hidrógeno verde, con el objetivo de exportar la mayoría de los 2 GW que se plantea producir en 2030.
El CEO de Enagás firmó ayer lunes un convenio con el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, para que este proyecto sea realidad y pueda operar en 2030 se alcance el transporte troncal de hidrógeno verde. Según explicó el presidente valenciano, la totalidad de la inversión corresponderá a Enagás.
Gonzalo destacó que la red de hidroductos planteada permitirá atender los grandes centros industriales de la región, principalmente el sector cerámico, químico y petroquímico y la actividad industrial de Sagunto, el aeropuerto de Valencia y los tres puertos de Alicante, Valencia y Castellón.
La red de gas
Enagás cuenta en la región con unas infraestructuras de 882 kilómetros de gasoductos de alta presión, cuatro estaciones de compresión, cinco centros de transporte y una de las seis plantas regasificadoras que opera en España. Esa planta de Saggas en Sagunto, descargó el año pasado el 17% de todo el gas que se consumió en España y ha operado junto con Barcelona una iniciativa para conectar el gas natural con Italia a través de barcos más pequeños.
Según el consejero delegado de Enagás, "2023 va a ser el año del hidrógeno. El hidrógeno verde y el biometano van a ser una parte muy importante de la apuesta de la descarbonización y la seguridad de la autonomía estratégica de Europa".