La avalancha de proyectos renovables que han conseguido la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), más de 60 GW, en los trámites administrativos ha traído de vuelta lo que hace unos años se llamaba el 'efecto caníbal'. Esto es, a que la entrada masiva de renovables reduzca los ingresos y la rentabilidad de las instalaciones ya existentes.
Se extiende la preocupación, especialmente en el sector eólico, que durante las horas centrales del día, cuando toda la fotovoltaica esté produciendo electricidad, no solo tengan que parar sus parques, sino que el precio tenga números negativos.
"No sería la primera vez que ocurre, por ejemplo, en Australia, el exceso de generación solar, que además es predecible porque todos los días sale el sol, ha llegado a bajar el precio en algunas horas hasta los 65 dólares/MWh negativos", explican fuentes del sector renovable.
"Si se conectan los 40 GW de fotovoltaica y los 12 GW de eólica para 2025 (fecha límite según los hitos del RDL 23/2020), en 2026 va a ocurrir sistemáticamente en las horas solares. Por eso hay que incrementar el consumo especialmente en esas horas y regular la entrada de potencia adicional de generación en función de la demanda", añaden.
"El problema es que no es viable el Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC) sin almacenamiento", señala a este diario Óscar Barrero, socio responsable de consultoría en el área de energía y utilities en PwC España.
"En PwC hemos reproducido el modelo propuesto por el Gobierno y sí funciona, pero se había diseñado que en 2030 deberíamos incorporar 60 GW de renovables, pero también 6 GW de almacenamiento, y aunque el primer objetivo podría estar en dos o tres años, en el segundo no hay nada hecho. Por eso, esperamos que ante el miedo a que caiga el precio de la electricidad, sobre todo cuando todos esos gigavatios estén en funcionamiento (en las horas centrales del día), muchos proyectos no podrán acceder a la financiación a no ser que consigan un PPA", añade.
Avalancha de PPA
El experto en energía de PwC asegura que "sin almacenamiento no salen los números", por eso, pronostica que "si en 2022 se firmaron un récord de 3 GW, en 2023 va a haber una avalancha de PPA (acuerdos de compraventa de energía)". Incluso "se podría multiplicar por tres, hasta los 9 GW".
En España se está viviendo un boom renovable, muy por delante de otros países europeos. "Las condiciones son inmejorables, tenemos recurso, un 35% más de irradiación solar que el resto de países del sur de Europa, además de mucho viento, y tenemos territorio", señalan fuentes del sector.
Según el último informe de Pexapark, España encabeza el tablero de acuerdos de PPA por cuarto año consecutivo, esta vez revelando 3,2 GW de capacidad en total. Pero lo que es significativo es que el 80% corresponde a solo dos acuerdos de Alcoa, que consume mucha energía.
Para esta consultoría y software empresarial, especializada en energías renovables y PPA, en un momento en que los costes de la energía son insostenibles, las energías renovables han pasado a un primer plano para ayudar a reiniciar la industria.
Mecanismos de capacidad
"La viabilidad de los proyectos dependerá ahora de la industria, pero también de que el Gobierno apruebe las subastas de capacidad para que se desarrolle el almacenamiento", explican fuentes del sector eólico.
"Somos el único país de Europa que no tiene en marcha los mecanismos de capacidad, un sistema de subastas donde caben las baterías, los bombeos, los ciclos combinados, pero también los agregadores de la demanda o la interrumpibilidad de la industria", continúa Barrero, de PwC.
"Calibrando cada tecnología en función de su disponibilidad y con el límite ya establecido de las emisiones, porque no puede haber neutralidad en este sistema, podría abrir la puerta a un respaldo que es necesario. Si mañana se pusieran en marcha los 40 GW fotovoltaicos de golpe, por ejemplo, sin almacenamiento, tendríamos un apuntamiento por debajo de 0,5, y eso es un desastre para el desarrollo de esa industria", añade.
Reforma del mercado eléctrico
Las eléctricas han mostrado su oposición a la reforma eléctrica europea propuesta por el Gobierno de España. Y excepto Francia, hay una gran mayoría de países que se han mostrado contrarios a una mayor intervención por parte del regulador.
"Los contratos por diferencia no se pueden convertir en 'el mercado'. Es un paso atrás absoluto. El cap de ingresos sinceramente tendrá más o menos efecto en función de si se prolonga mucho o poco en el tiempo", explica Barrero.
"España es el líder de PPAs de Europa y una palanca de atracción de industria (son un 40% más baratos que en Alemania). No nos lo cárguemos con las subastas. Y sobre todo, mercado de capacidad para que entre almacenamiento, o gran parte de las renovables aprobadas no se harán", concluye el experto.