
España se sitúa un año más a la cabeza de la Unión Europea tanto en déficit como en deuda pública, según los datos difundidos este viernes por Eurostat correspondientes al cierre de 2022. Unas cifras que serán determinantes a la hora de calcular el ajuste presupuestario que Bruselas exigirá a nuestro país en 2024, año en que volverán a aplicarse las reglas presupuestarias comunitarias. Alemania exige que a los países altamente endeudados se les impongan ajustes más duros que al resto.
Nuestro país cerró 2022 con un desfase presupuestario del 4,8% del PIB, cifra que equivale a 63.776 millones de euros. Aunque se ha producido una importante reducción de 2,1 puntos respecto al déficit del 6.9% registrado en 2021, España es el quinto país de la Unión Europea con un mayor agujero en sus cuentas públicas.
Los únicos países que tienen peores datos que España son Italia (con un déficit del 8%), Rumanía y Hungría (ambos con un 6,2%) y Malta (4,8%). En 2022, un total de 11 Estados miembros registraron un déficit superior al umbral del 3% del PIB que marca el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.

En el extremo contrario, un total de 6 Estados miembros tuvieron el año pasado superávit presupuestario. Los más altos fueron los de Dinamarca (3,3%), Chipre (2,1%) e Irlanda (1,6%). Holanda informó de una situación de equilibrio presupuestario en sus cuentas públicas el año pasado.
En el conjunto de la eurozona, el déficit público bajó del 5,3% registrado en 2021 al 3,6% en 2022, mientras que en el conjunto de la UE la caída fue de 1,4 puntos (del 4,8% al 3,4%). También el nivel de deuda pública en la eurozona se redujo ligeramente desde el 95,5% en 2021 hasta el 91,6% al final de 2022, y en la UE del 88% al 84%.
España pasó de una deuda pública del 118,3% en 2021 al 113,2% el año pasado, cifra que equivale a 1,5 billones de euros. Nuestro país es el cuarto más endeudado de la UE, sólo por detrás de Grecia (171,3% del PIB), Italia (144.4%) y Portugal (113,9%). El nivel de deuda de España prácticamente duplica el límite del 60% que fija el Pacto de Estabilidad.
A finales de 2022, los Estados miembros con menos deuda eran Estonia (18,4%), Bulgaria (22,9%), Luxemburgo (24,6%), Dinamarca (30,1%), Suecia (33%) y Lituania (38,4%). Un total de 13 Estados miembros superaron el umbral del 60%.
