El fabricante de automóviles Ford ha confirmado este martes que recortará su plantilla en Europa, con al menos 3.800 despidos, lo que representa el 11% de su plantilla. El 92% de los despidos se concentrará en Alemania y el Reino Unido, aunque impactará también en posiciones administrativas en otros países, como España.
La compañía cuenta con más de 35.000 colaboradores en Europa, aunque se concentran incipalmente en las plantas de Colonia (Alemania) y las factorías de Dagenham y Halewood (Reino Unido). Además, el negocio del gigante estadounidense enfrenta un declive continuado en el tiempo y solo cuenta con un 4,4% de cuota del mercado europeo, según datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA).
"Allanar el camino hacia un futuro sosteniblemente rentable para Ford en Europa requiere de acciones de amplio alcance y cambios en la forma en que desarrollamos, fabricamos y vendemos los vehículos Ford", ha afirmado este martes Martin Sander, el responsable del fabricante estadounidense en la región. El ejecutivo ha intentado resaltar que buscará que la mayoría de las salidas sean voluntarias.
Además del recorte en la plantilla, Ford prevé que su oferta de vehículos en Europa se limite a coches eléctricos en 2035. Al mismo tiempo, buscará desarrollar equipos más pequeños y eficientes para el desarrollo de nuevos coches.
Factoría de Almussafes (Valencia)
La nota de prensa enviada este martes por la compañía afirma que "España es la mejor posicionada para producir vehículos basados en una arquitectura de vehículos eléctricos de nueva generación", en referencia a su planta en Almussafes (Valencia).
La factoría emplea a unas 6.000 personas y confirmó en octubre del año pasado que dejará de producir el S-Max y el Galaxy a partir de abril de 2023, dos modelos que se suman a la pérdida del Mondeo este año. La fábrica valenciana solo produce el Kuga a la espera de que en 2026 comience a fabricar vehículos eléctricos.