Iberdrola, Repsol, Naturgy, Endesa, Moeve, bp, edp y TotalEnergies apuntan a un riesgo para el futuro verde
El sector energético, agrupado en torno al Club de la Energía, ha lanzado un comunicado contra el impuesto a las energéticas, en el aire todavía a expensas de si las pugnas entre los partidos se zanjan este jueves en el Congreso de los Diputados con su mantenimiento en el tiempo o con su eliminación de cara al próximo curso. La patronal energética presiona para que se certifique la muerte del gravamen y apuntan a una posible pérdida de inversiones milmillonarias.
“Prorrogar o incluir nuevas cargas impositivas a las compañías del sector energético dificultarán la materialización de las inversiones que es necesario llevar a cabo, estimadas en más de 30.000 millones de euros para los próximos tres años, así como el desarrollo y viabilidad económica y financiera de los proyectos”, concluye el comunicado firmado por Iberdrola, Repsol, Naturgy, Moeve (antigua Cepsa), Endesa, bp, edp y TotalEnergies.
Asimismo, apuntan al impacto que supone para España como “destino de inversiones” y “sobre la competitividad, los puestos de trabajo, y la lucha contra el cambio climático del país”.
Plan Nacional Integrado de Energía y Clima
La visión de las energéticas asume ya que transición energética es la gran oportunidad de España para liderar un nuevo modelo de crecimiento más sostenible, a la par que se abre una ventana de reindustrialización y creación de empleo que pueda aprovechar todo el potencial de las energías renovables, ámbito en el que el país posee una ventaja comparativa frente a otros países de nuestro entorno. “Las empresas energéticas son conscientes de la importancia de este proyecto país, y su compromiso, vinculación, y capacidades necesarias para la transición energética y la sostenibilidad son absolutos”, trasladan.
Para canalizar este salto es clave el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), que constituye la herramienta de orientación estratégica nacional que integra la política de energía y clima a 2030. Su cumplimiento se estima que supondría un incremento del 3,2% del PIB en 2030 y un aumento de 560.000 empleos para el mismo año. Para que esto suceda, desde el Club de la Energía aseguran que se requiere de “un proceso inversor perdurable en el tiempo que permita contar con las tecnologías, equipamientos y capital humano necesarios en toda la geografía y sectores económicos”.
“Resulta fundamental evitar la incertidumbre, promoviendo un entorno favorable basado en procedimientos normativos adecuados, seguridad jurídica y estabilidad regulatoria y fiscal para materializar los 308.000 millones de euros de inversiones estimadas, de las cuales, un 82% deben provenir del sector privado”, reclaman a más de retirar el impuesto a las energéticas.